Ya están en pleno desarrollo las esperadas fiestas de nuestro pueblo. El sábado, 17 de agosto, tuvo lugar el primer acto, la inauguración de la exposición “Preparando el centenario de El caso de Otones de Benjumea”. Esta muestra ofrece nueva información fotográfica y documental sobre el reciente pasado histórico. Permanecerá abierta durante las próximas semanas y, tanto el día de la presentación como los posteriores, está siendo visitada por un buen número de personas que quieren conocer más sobre el trascendental acontecimiento que se produjo en 1927.
El mismo sábado, por la noche, y el domingo, llegó el esperado estreno de una nueva obra de Teatrones, el grupo de teatro aficionado de la A.C. El Corralón. El lleno registrado en las dos funciones ofrecidas da muestra de las expectativas que se habían generado en torno a la representación de la obra Crepúsculo y telón, basada en el original de F. Nieva y adaptada, en este caso, por Carlos Palacios, su director. A pesar de que se trata de un espectáculo complejo en cuanto a sus significados y con no pocas dificultades en su puesta en escena, la experiencia, el esfuerzo y el buen hacer de actrices y actores solventan con oficio y dedicación el nuevo reto asumido, atreverse con el teatro transgresor y de vanguardia de uno de nuestros autores teatrales contemporáneos más reconocidos. Magnífico escenario, excelente ambientación, música muy apropiada… compusieron una gran noche de teatro.
El lunes, comienzo de la semana, podemos calificarlo como saludable. Por la mañana, marcha al río Pirón, en Villovela, por el Parral, nuestra referencia fluvial por excelencia, ya desde la niñez cuando acompañábamos a nuestras madres montados en burro a hacer la colada. Esta actividad de senderismo tiene gran importancia y ha de ser consolidada e incrementada, si cabe.
Y, por la tarde, los campeonatos infantiles en las instalaciones deportivas. A su vez, en el salón multiusos de la asociación un taller de nutrición a cargo de clínicas Azucena Medina que resultó muy instructivo y entretenido. Por tanto, dos ingredientes fundamentales de la salud, comer sano y hacer actividad física.
El martes, además de los talleres infantiles, en los que los más pequeños aprenden jugando y divirtiéndose, binomio educativo más eficaz, se montó un mercadillo popular en el que se vendían ropa y objetos de segunda mano a precios muy reducidos con la intención de destinar lo recaudado a fines benéficos. Se trata de una iniciativa, no muy frecuente en nuestras programaciones, cuya continuidad podría mantenerse. Se creó un buen ambiente en torno a esta actividad.
Los concursos gastronómicos también son de presencia obligada en el programa de fiestas. En este caso, el producto o resultado solicitado ha tenido que que ver con el variado sector de las empanadas. Buena participación en la elaboración y mucha en la degustación, que se ha acompañado con jamón, artesanalmente cortado y presentado por Julia, ya un clásico de la gastronomía festiva.
Y, para terminar la jornada, espacio escénico en Las Cañas. Mucho público asistente.
Indicar, para terminar esta primera crónica de los primeros días de fiesta, que la mayor parte de la actividades realizadas han sido de producción propia, destacando de esta forma la perspectiva de creación cultural sobre aquella otra menos participativa de solo consumo cultural.
Ya en estos primeros días, la mayor parte de las casas están abiertas, las calles, de nuevo, están llenas de gente, los parques y los campos de juego acogen a niños y jóvenes, las instalaciones de la asociación están repletas de bullicio, charlas amigables, reposo placentero, encuentros esperados, paseos reconstituyentes…
Agradeciendo a la junta directiva de la asociación su esfuerzo y solvencia, desde esta tribuna deseamos a todos unas divertidas y provechosas fiestas y semana cultural.
Seguiremos informando.